Los años que ya no cumples
empiezan a acumularse lentamente
a levantar paredes
a cavar
zanjas
a separar las algas de la espuma
a separar las algas de la espuma
a ir y regresar
por una línea alterna del tiempo:
de la madurez a la adolescencia
de la infancia luminosa
a tu
ancianidad imposible
Las edades que me pueblan
-no sé si a costa
de las tuyas-
hacen su agosto cada vez más seguido
y no hay mes del año que no me reprochen
mi vocación por el ocio
la paz a
cuestas
las palabras no dichas
los cientos de detalles que ante tu recuerdo
me enjuician y sentencian
a ser un hombre feliz
a pesar de todo